Cheesecake con chocolate blanco y pistacho

Ingredientes:

Para la base:

180 g de galletas McVitie’s Digestives Integral
100 g de mantequilla

Para la crema:

500 g de queso crema
120 g de azúcar glas
200 ml de nata fresca
10 g de cola de pescado
1 limón (opcional)
1 vainilla en rama

Para la cobertura:

125 ml de nata fresca
150 g de chocolate blanco
150 g de azúcar
150 g de pistachos sin cáscara
2 cucharaditas de jugo de limón

Preparación:

1. Desmenuzar las galletas McVitie’s Digestives Integral en un bol y añadir la mantequilla derretida. Mezclar hasta obtener una mezcla homogénenea. Preparar un molde de bisagra con un diámetro de 22 cm, forrar con papel de horno incluso en los bordes y extender la mezcla en el interior, presionando bien con la parte posterior de una cuchara. Coloque la base en la nevera durante 30 minutos (o en el congelador durante 15 minutos).
2. Con una batidora eléctrica, batir el queso crema con 50 g de azúcar glas y las semillas de vainilla hasta que la mezcla esté suave y lisa. En un tazón, ponga la cola de pescado agregando agua fría y deje que se ablande durante al menos 10 minutos. Calentar 50 ml de nata, añadir la gelatina bien exprimida y mezclar hasta que la preparación se haya enfriado, a continuación, añadir la crema de queso. Por separado, batir 150 ml de crema junto con los 70 g restantes de azúcar glas. Una vez que la nata esté lista, añadir suavemente la crema de queso. Verter la crema obtenida en la base, nivelar con la parte posterior de una cuchara y poner la Cheescake en la nevera durante al menos 4-6 horas.
3. Calentar 125 ml de nata y verter en un bol al que se añadirá el chocolate blanco cortado en trozos pequeños. Revuelva hasta que el chocolate se convierta en una crema brillante y extienda una capa sobre el pastel. Ponga la Cheesecake en la nevera de nuevo durante 4 o 5 horas.
4. Derretir el azúcar con el jugo de limón a fuego lento, añadir los pistachos y caramelizar la mezcla. Extende el caramelo obtenido sobre una capa de papel de horno y, con la ayuda de otra hoja de papel encima de la mezcla, aplánalo con un rodillo. Una vez que el caramelo se haya enfriado, rómpelo al tamaño deseado (por ejemplo, picado en copos) y decora la Cheesecake a tu gusto.